jueves, 5 de febrero de 2009

CODIGO 46

Recuerdo hace unos(bastantes años) una conversación con un colega….el tema, la trama eran los envoltorios….me explico: de cómo la presentación de algo, que en este caso era un álbum musical de un famoso grupo con nombre de bombardero(¡!!), puede afectar totalmente al producto final. De cómo el productor (Brian Eno) hizo de Achtung Baby uno de los álbumes cumbre de U2. Y es que aunque la melodía, el corazón siga siendo el mismo, el sonido de esa guitarra justo en ese momento con esa reverberación, o los clicks apenas audibles, o esos sonidos sintetizados corales, vamos la producción del álbum se infiltra completamente haciendo el producto algo en este caso sublime.

Eso mismo pasa en el cine. No será, no es lo mismo, un guion dirigido por Lynch que uno dirigido por Spielberg, por poner un ejemplo. El resultado final serán diferentes películas. En el caso que nos ocupa CODIGO 46, película dirigida por Michael WINTERBOTTOM nos deja un regusto a deja vu. Muy difícil lo dejó Ridley Scott y su absoluta Blade Runner. Insuperable muralla la que construyo Sofia Coppola y su Lost in translation. Y es que CODIGO 46 guarda cierto paralelismo con estas dos cicatrices en la memoria.
CODIGO 46 se situa en un futuro no muy lejano donde el estado controla completamente al individuo, todo está enfocado para preservar la calidad de vida de la especie: leyes eugenésicas que impiden la procreación de personas con similitudes genéticas(código 46), viajes que solo son factibles con permisos estrictamente controlados…. Las ciudades son una amalgama de razas, hasta el punto que el idioma es una mezcla de multitud de ellos. Fuera de ellas sobreviven marginalmente en parajes deserticos(ah! Que fascinante fotografía…) los no tan privilegiados.

Tim Robins, gigante en altura e interpretación, es un agente con una especial habilidad intuitiva(inducida mediante un virus) que investiga a Maria, joven subversiva que trafica con permisos de viaje falsos.

Su primer encuentro, su amor imposible. Scarlett Vs Murray en Lost in Translation. Esa frialdad en la narración. Esa adorable musica. Esos fotogramas limpios,impolutos, austeros. Winterbottom es un cineasta arriesgado…no es una película fácil.

Codigo 46 es un estudio sobre como los avances científicos pueden trastocar el destino “normal” del ser humano. ¿Podriamos encasillarla en “obra de ciencia-ficcion”? Si me contestan afirmativamente, les contestare que no es una al uso. ¿Podriamos encasillarla en “obra de cine negro” con “amour fou”? . Les contestaría lo mismo, que es una película arriesgada, que bebe de otras películas vistas anteriormente pero que , su especial, su renovado planteamiento me ha seducido, lo suficiente para recomendarla, cosa que hago encarecidamente.

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